Puede hacernos llegar sus consultas o comentarios a glaramb@hotmail.com Telefono 43265223 -15581719

Puede hacernos llegar sus consultas o comentarios a glaramb@hotmail.com Telefono 43265223 -15581719

martes, 23 de noviembre de 2010

Habría que trabajar medio año para pagar los impuestos

La recaudación impositiva representa el 31,5% del PBI y es 10 puntos mayor a la de 2001. El gasto público sería récord, 50% mayor que en 2004. En la actualidad, la carga tributaria total, entre Nación, provincias y municipios, absorbe 45% de los ingresos familiares.


Según una nota publicada por el diario Clarín, un asalariado que paga todos sus impuestos debe trabajar desde el primero de enero hasta el 17 de junio para cumplir con sus obligaciones tributarias. En la última década, la AFIP logró una recaudación récord y la presión tributaria más alta de su historia.




La recaudación impositiva llega al 31,5% del PBI, 10 puntos más que la que regía en 2001 y, de acuerdo al experto Nadín Argañaraz, es lo que explica el alto nivel de gasto. Medido en términos del PBI, el gasto público de la Nación supera 50% al de 2004. Y si bien aumentó el gasto social y educativo, hay otros ítems difíciles de justificar. La ecuación arroja, así, presión fiscal récord y gasto récord.



Para el ex viceministro de Economía Miguel Bein una buena parte del aumento de recaudación se explica por el alza de los precios internacionales de los productos que exportamos. Bein apunta que, en promedio, se ubican 45% por encima de lo que cotizaban en la convertibilidad.



Y añade: “La gran novedad es cómo juega la inflación. El Gobierno engorda sus ingresos y a los salarios de la administración pública los actualiza dos veces por año y estira los pagos de distintas obligaciones, con lo que la inflación se convirtió en socia de sus cuentas. Las empresas, además, no pueden ajustar sus costos por inflación, con lo que pagan más impuesto a las ganancias”.



Argañaraz señala que para mantener la recaudación en forma hay una serie de impuestos indirectos que al final pagan los que menos tienen.



Un caso es el impuesto al cheque que se carga en los costos empresarios. Y enfatiza que en las provincias, como los gobernadores no quieren subir el impuesto inmobiliario o las patentes por el costo político que implica, optan por aumentar Ingresos Brutos, que también se traslada a precios. “Esto genera una estructura regresiva y expuesta al ciclo económico”, dice Argañaraz.



De momento no figura en la agenda oficial una reforma impositiva que apunte a equilibrar mejor el peso de un sistema que tiene en un IVA de 21%, uno de los impuestos al consumo más elevados del mundo. Actualmente la carga tributaria total, entre Nación, provincias y municipios, absorbe 45% de los ingresos familiares.



Por cierto, la presión tributaria en la Argentina (31,5% del PBI) está lejos de la que aplica Dinamarca con el récord global de 47% o la de Italia, Francia y Finlandia con 43%. Aunque también son muchísimo mejores los servicios que presta allá el Estado en salud, educación, seguridad e infraestructura social.

No hay comentarios:

Publicar un comentario